Había conseguido alejarse del maligno influjo (sea lo que sea eso) que producía en él la facultad, y un autobús y dos transbordos de metro después se encontraba por fin, cara a cara con el problema, el inicio de la práctica. En ese instante, llegó un mensajero (Messenger) de parte de Morthrandir, preguntándole qué tal lo llevaba, y la respuesta de furia fue instantánea "odio el puto pascal, es una mierda de lenguaje". Morthrandir se quedó pálido, Pascal, has dicho? -preguntó-, no puede ser, otros han dicho esa frase antes, y no tú. He de pedir consejo al mentor de la orden morlock, furia, es sabio y poderoso, él sabrá que hacer. Y así sin más, colgó el cartel de no disponible, y cabalgó en su corcel, líneagris (la circular), hasta la casa del mentor. Y allí apareció una torre negra, Gurthang, y el nombre de su admin., turin, y las jugadas le seguían.
Una vez allí, atravesó la puerta sin dudar, y cual fue su sorpresa, al encontrarse a Turin consultando la ayuda del Turbo Pascal. Con un cortante y preocupado tono, afirmó: "esa ayuda es un arma peligrosa turin, no sabes quien puede estar mirando", y al grito de "ANSI C" arrojó un vaso de agua sobre Turin, que, nervioso, se revolvía sin saber bien que hacer. Con Gurthang inundada, y Turin de vuelta al lado de los Morlocks, Morlock-Thrandir, volvió a su casa para descansar, pues al amanecer del tercer día, había quedado con los demás miembros de la comunidad en el lugar habitual, el bit pisador, cuyo dueño, se planteaba seriamente cambiarle el nombre al byte pisador, dado el desuso de la unidad de información.
A las 9 de la mañana Morthrandir, Turin y Calvin de los bosques se sentaban y debatían asuntos menores. A eso de las 10.30 (11.00, puntual como la muerte) un carro rojo con una "E" marchaba por el camino de acceso a la facultad. La comunidad le salió al paso, y allí estaba furia, con cara de estreñido. Portaba entre sus manos un disquete.
Morthrandir, dejando atrás al grupo, se adelantó, y en su habitual tono severo, afirmó: "llegas tarde, furia". Furia, alarmado por la repentina aparición, frunció el ceño, le miro a los ojos y creciéndose afirmó, "un creativo nunca llega tarde, ni pronto, llega exactamente cuando se lo propone". Calvin de los bosques, que se había sumado a Morthrandir, torció la cara al oír las palabras de furia, como tratando de expresar su desacuerdo con lo formulado, y sin avisar exhortó: "que cabrón, así que te has propuesto llegar tarde" y el carro empezó a arder. Mientras esto sucedía, turin estaba en el baño.
Morthrandir, sin poder resistirlo más esbozo una sonrisa, extendió sus brazos, y gritó FURIAAAAA!, en un tono tremendamente amable y acogedor.