Como en sueños, volaban traviesas las sensaciones de sus sentidos, que trataban de jugar al escondite con su razón. Era perfectamente consciente dentro de su cabeza, de que no controlaba plenamente lo que ocurría fuera de ella.
Era un intento ridículo de tormenta, pero parecía vencer la batalla al sol. Su mente, como el filo de una guadaña, cortó las nieblas del agotamiento, y consiguió volver a poner orden a sus receptores justo a tiempo para que no se partiera un tobillo. Una amarga sensación de suerte por los pelos, cubrió sus labios.
Con la fortuna en sus bolsillos y su alma, caminó decididamente hacia su clase.
Fué consciente de haber escrito cosas en un papel. Era capaz de recordarse haciendolo, deseando hacerlo, con ansia ferviente. Era curioso lo claras que parecian ahora todas esas afirmaciones .
"Hablaba sin cesar, inundando el aire, como si el sonido de su voz le produjera un oscuro y extraño placer. Hablaba,sin ser consciente de que ni una sola de sus palabras traspasaban la barrera del tedio que los oyentes habian creado como defensa. Solo era ruido de fondo para mentes que en aquel momento se hallaban a miles de kilometros de ahi, mientras sus cuerpos vacios, casi inertes, prestaban fingida atención"
Ayer se dió cuenta de que su sangre es más que eso. Su sangre son palabras, son rimas, metáforas. Su sangre es tinta. Lleva algo dentro que necesita salir constantemente, lleva deseo de belleza, lleva sentimientos atormentados, lleva desgarradoras sensaciones, lleva armonia, simetría y color. Lleva amor a las ideas, esencia de las mimsmas, y creyó al fin, que puede llevar cualquier cosa con tan solo proponerselo.
Dijo una vez:
Si alguien ha conseguido hacerlo, yo seré tambien capaz.
Si no lo han conseguido, puede que yo sea el primero.