En estos tiempos que corren, en que internet se ha convertido en el sentido de la vida para muchos seres humanos, en que cada vez más y más empresas montan su núcleo de negocio en torno al desarrollo por y para internet.

En estos tiempo en los que prevemos que en breve casi todo se pueda hacer por internet, en algún momento de esta gigante burbuja 2.0 que nos rodea, en que hasta los telediarios sacan "lo mas visto en internet" va a reventar.

En algún momento alguien se tiene que dar cuenta de que en el fondo, y por muy acojonante que parezca, internet no es más que una mega-red mundial. Internet no es la solución a los problemas del hombre, al hambre en el mundo, a la angustia existencial, a la desesperación humana. Internet es contenido y servicios, es interactuar. Es un medio de escape, una vía, un soporte si se quiere, un foro mundial, y mola, y hay chorraditas, y cosas geniales y servicios muy útiles.

La web2.0 no ha ayudado a nadie, no ha solucionado ningun problema grave, no ha tranquilizado a alguien desesperado. La web2.0 o la web normal, o lo que quieras, es un medio, una herramienta. Deja de leer esto y vete a tomar algo con tus amigos. O consiguete unos y vete a tomar algo con ellos. Ese es mi consejo de hoy :)

Java es la tecnologia del futuro.
Por eso no deberiamos usarlo ahora.

Con Java consigues la potencia del pasado para los ordenadores del futuro

y los patos dispararán avispas por el pico para atacar y también tienen que tener unas patas turbopropulsadas para navegar a mas de 50 nudos por el agua y también .....

Al hilo de un post de Oksi sobre las coincidencias, y de una conversación telefónica, estoy convencido de que, si bien todo sucede por un motivo (y que el motivo lo acabemos "adjudicando" a posteriori no le quita magia al asunto) las coincidencias existen, y son eso, coincidencias.

Las señales, a mi modo de ver, no son más que interpretaciones a posteriori de nuestro subconsciente tratando de darle una respuesta y un sentido a lo que nos rodea. Como el empujoncito de ING Direct (para los que hayais visto el anuncio) Es ese convencerte de que algo que no es más que el puro hecho de que dos circunstancias coincidan es la clave para dar un paso en una direccion en la que no te atrevías a darlo.